Tu labor es fundamental no solo en la prevención, sino también en la restauración emocional de las víctimas. 
Tu ayuda puede devolverles la confianza, la seguridad y la esperanza.

Si eres abogado penalista, tu conocimiento puede ser clave para guiar a las familias en el
difícil camino hacia la justicia, asegurando que los agresores no queden impunes.
Tu experiencia puede cambiar el destino de un niño. Si quieres aportar tu conocimiento y tu vocación a esta causa, contáctanos a través de nuestra pestaña o a través de nuestro número de whatsapp.